Todo depende de la acción.
Con casi 130 kg, Torsten (57 años, 1,80 m) tiró de la cuerda de emergencia, aunque durante muchos años se había acostumbrado a su alto peso. Su propósito quedó claro a finales de 2022 y el 2.1.23 llegó el momento. Contrariamente a todos los escépticos, hoy casi ha alcanzado su objetivo, ahora usa talla 40 y dice «¡Me siento increíble!»
Mi motivación

Los casi 130 kg los había llevado conmigo durante 10-15 años. Simplemente me gusta comer, pero no conocía límites y exageraba en las cantidades. Por la noche también me gustaba tomar alguna cerveza. Además, no hacía ningún tipo de ejercicio, lo cual es habitual en mi trabajo de representante comercial. Como apenas tenía limitaciones de salud, durante mucho tiempo no me di cuenta de lo poco saludable que vivía.
Sin embargo, ya me sentía abrumado al subir escaleras. Especialmente en presencia de mis empleados, cuando visitábamos clientes, me resultaba incómodo. En las fotos cada vez veía más claramente mi aspecto «corpulento». Con 130 kg uno solo puede sentirse cómodo hasta cierto punto.
Tuve las primeras experiencias con otro Shake, que sin embargo no me gustó y que tampoco tenía un concepto ni un plan de dieta como el de Precon.
Luego busqué en Internet y encontré Precon. Pedí el plan de dieta, vi la curva de peso, lo que me motivó de inmediato. También me gustó la comunicación en la página web, me sentí acogido y no juzgado. También me gustó la variedad de productos.
Así que decidí en otoño de 2022: el próximo año quiero empezar. Al principio nadie me creyó. Me tomaron a broma: «sí, claro, tú hazlo», decían. Pero empecé el 2.1. y lo seguí adelante. Al mismo tiempo descubrí e integré el Nordic Walking como deporte adicional. Al principio solo unos 4-5 km con un pulso aún alto, ahora estoy en el rango normal y desde el tercer trimestre de 23 corro a veces 10 km con pulso moderado, 4-5 veces por semana. La compra de un reloj inteligente para registrar mis pasos y establecer objetivos de km me motivó aún más a alcanzar mi peso deseado (antes no habría parado).
Con el Nordic Walking encontré un deporte que me da mucha alegría. Con 130 kg no se corre, pero caminar con los bastones me dio desde el principio motivación.
Mi programa
Puedo cambiar el famoso interruptor en la cabeza. Así dejé de fumar hace unos 30 años: aunque fumaba tres cajetillas al día, pude dejarlo de un día para otro. Esto fue comparable. Una vez tomada la decisión, no hubo vuelta atrás. Los productos son deliciosos, sacian y nunca me faltó nada. Ya no sentía la necesidad de vaciar la nevera y ni siquiera comí una manzana entre comidas porque sabía que aumentaba el nivel de insulina y por tanto interrumpía la quema de grasa. Solo viví según el concepto.
Mi día comenzaba alrededor de las 9 con una barra, al mediodía tomaba otra barra o a veces un Shake. Los sachets individuales son muy prácticos para ello. Por la noche cocinaba yo mismo y de forma más saludable que antes. Me hice un plan de comidas, me informé un poco antes, cocino principalmente bajo en grasas, como porciones más pequeñas y ahora uso un poco el sentido común saludable. Como en Precon no hay prohibiciones, nunca sentí que me faltara algo. Comer también debe ser divertido. Entonces el éxito viene automáticamente.
Por eso también era importante para mí no renunciar a los eventos sociales. No me castigaba a mí mismo. En una invitación entre semana, también tomé una vez un vino con soda, pero ya no más chupitos. Puedo resistir las tentaciones, por ejemplo, con galletas en las reuniones. No me molesta que otros las coman, yo no las necesito.
Los viernes por la mañana me pesaba, siempre fue una buena motivación. Sentir y ver que funciona es genial. Cuando después de medio año el entorno se acerca a ti, es una gran confirmación. Incluso los escépticos tuvieron que reconocer el éxito, lo que fue doblemente divertido.
Pero: Por supuesto, lo hice para mí, no para los demás.
Mi éxito
Aún me faltan unos 5-7 kg para el objetivo, pero ya me siento más saludable, en forma y atractivo. Por la mañana, cuando me pongo un pantalón y tengo que apretar el cinturón, pienso: «Hice todo bien»
Soy disciplinado y ambicioso y no me detengo a mitad de camino. Hay que seguir adelante. Todo depende de la acción. Por eso tenía claro que podía lograrlo. Precon también apoya bien, llamé una vez y recibí ayuda de inmediato. No dudé del concepto porque sabía que yo mismo soy responsable del éxito. Si sigo comiendo papas fritas, bebiendo alcohol y sin hacer deporte, eso depende solo de mí. Por supuesto, los productos tienen su parte en el éxito. Son sabrosos y ayudan.
Por cierto, ya me compré una cinta de correr para no tener que estar afuera a 35 grados. De lo contrario, incluso camino bajo la lluvia.
Para mí también es natural mantener mi estilo de vida saludable, no voy a tirar dos años por la borda. Como viajo mucho, siempre habrá una barra en el maletero. Antes comía un bocadillo con embutido al mediodía, ahora hay una barra y un cappuccino. Me alegra que los productos se puedan integrar bien en el día a día.


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