Número de raciones
2
- Enjuagar cuidadosamente los boletus secos bajo agua corriente. Luego, dejarlos remojar en un bol con agua o leche baja en grasa durante 30 minutos. Escurrir y cortar en trozos pequeños.
- Mientras los boletus se remojan, cortar los champiñones en rodajas finas. Limpiar las cebolletas y cortarlas en aros finos.
- Tostar los piñones en una sartén sin grasa hasta que estén dorados.
- Calentar el aceite de oliva en una olla y sofreír brevemente el arroz para risotto. Añadir los hongos y también sofreír brevemente. Verter el caldo y el vino y llevar a ebullición. Sazonar con sal. Cocinar a fuego lento hasta que el arroz haya absorbido casi todo el líquido. El risotto debe tener una consistencia cremosa y aún estar firme al morder. Incorporar las cebolletas, los piñones y el parmesano. Por último, añadir el perifollo.
- Servir el risotto directamente, ya que de lo contrario se sigue cocinando y pierde cremosidad.
Tipp: En lugar de champiñones frescos, también puede usar setas congeladas. Quien encuentre que el tiempo de cocción es demasiado largo, puede prescindir de los boletus secos y usar solo productos frescos o congelados. El agua de las setas o la leche, colada a través de un colador y añadida al risotto, aporta una porción extra de aroma. En este caso, utilice solo 150 ml de caldo de verduras en lugar de 250 ml y 100 ml de agua de boletus/leche. En lugar de perifollo, también puede usar otras hierbas frescas o congeladas finamente picadas, según su gusto y disponibilidad.
30 g de boletus secos
300 g de champiñones marrones, limpios
3 cebolletas
20 g de piñones
1 cucharada de aceite de oliva
150 g de arroz para risotto (Aborio o Carnaroli)
250 ml de caldo de verduras
70 ml de vino blanco
30 g de parmesano, recién rallado
Pimienta recién molida, sal
1/2 manojo de perifollo

