Número de raciones
2
- Cortar la pechuga de pollo en tiras de aproximadamente 1 cm de ancho. Pelar la cebolla, partirla por la mitad y cortarla en tiras finas. Calentar la mitad del aceite de colza en una sartén y dorar las tiras de pechuga de pollo por todos lados, añadir la cebolla y sofreír hasta que esté transparente. Desglasar con el jugo de lima y añadir la salsa de soja. Incorporar la miel, el jengibre y la ralladura de lima, luego llevar todo a ebullición. Sazonar con sal y pimienta. Añadir las hierbas y el coco rallado y mezclar bien.
- Pelar el ajo y cortarlo en láminas muy finas. Calentar el resto del aceite de colza en una olla y sofreír las láminas de ajo hasta que tomen un ligero color. Añadir el arroz, sofreír hasta que esté transparente y desglasar con el caldo de verduras. Salar un poco y cocinar hasta que esté al dente. Añadir más caldo de verduras o agua si es necesario.
- Servir el pollo con jengibre y lima en los platos y acompañar con el arroz al ajo.
Tipp: Los aceites esenciales del cilantro, también llamado perejil asiático, actúan de manera similar al comino y al hinojo estimulando el apetito, favoreciendo la digestión y aliviando los espasmos en molestias estomacales. Si el aroma le resulta demasiado intenso, sustitúyalo por perejil o albahaca tailandesa.
200 g Pechuga de pollo sin piel ni hueso
1 cebolla mediana
2 cucharadas de aceite de colza
Jugo y ralladura de 1 lima sin tratar
2 cucharadas de salsa de soja
1 cucharada de miel
60 g de raíz de jengibre fresca, pelada y finamente rallada
1 cucharada de cebollino picado
1 cucharada de cilantro picado
1 cucharada de coco rallado
280 ml de caldo de verduras
140 g de arroz basmati
Sal, pimienta recién molida
2 dientes de ajo

